domingo, 7 de abril de 2013

El libro de reclamaciones por favor

Ahora en mi nueva etapa como hostelero el contacto mutuo con la gente me origina grandes amistades pero
grandes enemigos que hacen que te saquen de tus casillas cuando te intentan engañar cuando muchas veces el cliente no tiene la razón, pero ¿qué vas hacer? Si te llega un payaso con ganas de pelea tú no puedes hacer nada más que hacer lo que él te pide.

En estos años me he tenido que enfrentar con mucha gente, en donde te muestras ‘espabilado’ o te matan acerca de críticas sin sentido. En este último año he tenido que digamos dos disputas con mis clientes la primera hace ya casi de medio año cuando yo ocupaba mi puesto de recepcionista cuando la entrada prevista para ese día se presenta les ofrezco el apartamento y a los pocos minutos me piden el libro de reclamaciones ya que no le gusta el apartamento (un apartamento que habían reservado previamente en fotos), ellos decían que había pelos en el suelo, y que la ducha estaba en mal estado, yo les ofrecí rápidamente un apartamento de mayor nivel económico a los 20€ que pagaron por día, pero ellos lo negaron con la misma excusa, al enseñarle el otro apartamento ya reservaron lo de pedirme el libro pero se largaron y menos mal que se largaron porque ese tipo de gente la odio que van de tirarse los pedos más altos que el culo solo para conseguir una estancia gratuita
La ultima disputa ha sido hoy y necesitaba un poco desahogarme. Resulta que hoy estaba yo con mi padre una tranquila tarde de domingo viendo el futbol en el restaurante cuando llega un cliente, muy amable les atendemos ofreciéndoles el menú del día, pocos minutos se incorpora otro a la mesa, ya son 3 que mientras esperan la comida de UNO beben la bebida alcohólica más barata del restaurante, llega su comida le ofrecemos una salsa (totalmente gratuita) y su sopa, se acaba la sopa y tiene la cara el payaso de decir que la sopa tenía un bicho que le vio las patas y todo, rápido dijimos lo que se podía apreciar a simple vista que era un trozo de alga o similar que se pega a la concha del molusco en este caso al mejillón pero el en su afán de quejarse y comer gratis, porque ojo se lo comió todo! Nos pide el libro de reclamaciones y en él te pone a parir a ti como persona diciéndoles que el trato por el personal fue nefasto, díganme que trato va ser nefasto de un camarero de 60 años que lleva trabajando el sector 43 años y sin ninguna queja desde sus comienzos. Yo me quedé al margen ya que veía venir que la actitud de este individuo iba a ser complicado le pase las riendas a mi padre.

Y es que hay mucha gente espabilada que te hace la gracia y comer gratis. Yo también me pongo en su lugar pero si yo fuera él tendría un poquito de respeto y dignidad, si ves que hay un insecto en la sopa, pues no te la comas y pides otra, no te comes toda la sopa y al final ves el mencionado. Y es que si hubiera un insecto me parece de lo más lógico caer, ¿Por qué no se podría caer un insecto si comes en una terraza en primavera y con muchísimo viento? Dispongo de un ejemplo, tengo una piscina y todas las mañanas amanece llena de insectos ¿Por qué? Porque me encanta llenar la piscina y tirar objetos en ella, no me jodas. Ten un poquito de respeto hacia la gente y antes de reclamar algo estate convencido de las cosas y no seas tan cara dura de denunciar y encima mofarte con el camarero burlándole el pagar la cuenta. Que también díganme si las bebidas alcohólicas que se tomaron tenían insectos o pelos o lo que coño fuese.

En fin me he quedado un poco a gusto desahogándome aquí ahora me vendrá una inspección al restaurante por el payaso este y lo mejor es que no tiene pruebas sino que el cliente siempre tiene la razón! Así que ya sabéis sois de afuera y queréis comer gratis o joderle la vida al empleado no te preocupes le pides el libro de reclamaciones porque en tu sopa hay… hay… mmmm.. un pelo y hala! Buen provecho.

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